Son seis las personas de la unidad de Gendarmería que continuar sus estudios gracias al apoyo del servicio.
Durante el año 2019 cuatro usuarios del Centro de Educación y Trabajo (CET) de Putaendo cursaron una carrera de pregrado en universidades o institutos profesionales de la provincia de San Felipe. Para este 2020 la cifra llegará a seis, esto gracias al permiso de estudio y capacitación que puede entregar el establecimiento de Gendarmería.
Los 45 usuarios del establecimiento deben trabajar durante el día en algunos de los talleres laborales con que cuenta la unidad, por lo que quienes estudian lo hacen en horario vespertino.
El jefe (s) del Centro, suboficial mayor Alejandro Zamora, destacó que para “nosotros es muy importante entregar las herramientas necesarias a los usuarios para que ellos se inserten a la sociedad a través de la educación. Estamos autorizando a que salgan a estudiar afuera”.
“Siguen con las mismas obligaciones; ellos tienen que cumplir con los horarios de trabajo, (pero) se le hacen espacios para los estudios. Tenemos una biblioteca donde ellos estudian, tenemos una sala de uso múltiple, e inclusos se les permite llevar sus notebook para que estudien en sus celdas. Estamos dando todas las facilidades para que ellos logren una carrera. Ha sido una experiencia buena, se nota que al darles ciertas libertades responden muy bien y se esfuerzan bastante”, agregó el suboficial mayor.
Por su parte el seremi de Justicia y Derechos Humanos, José Tomás Bartolucci, expresó que “Es rol del Estado promover las condiciones necesarias para que sus habitantes alcancen el máximo desarrollo espiritual y material. En ese sentido, para Gendarmería de Chile, brindar oportunidades para cursar sus estudios superiores a quienes cumplen penas privados de libertad, se enmarca en este contexto. Como gobierno, nos sentimos satisfechos y orgullosos cuando se observan resultados positivos en este sentido y, felicitamos, por tanto, el espíritu de superación de las y los internos que toman la oportunidad y asumen el desafío de adquirir herramientas para su reinserción social y laboral efectiva”.
El año pasado los estudiantes aprobaron todos sus ramos, información que fue entregada por el encargado educacional de la unidad, Alejandro Machó.
Consultado respecto al proceso que deben realizar los privados de libertad para acceder a la educación superior, el psicólogo de Gendarmería sostuvo que “ellos tienen un proceso de postulación (interno), igual a todos los beneficios intrapenitenciarios, que es de estudio y capacitación. Allí se evalúa los tiempos, continuidad de estudios y conductas. En base a esos requisitos se hace una postulación, donde se genera un informe de todas las áreas del CET, y ésta se aprueba o se niega”.
Jorge González (32) comenzó a cursar la carrera de técnico en administración de empresas, en modalidad online, mientras cumplía su condena en el Centro de Cumplimiento Penitenciario de Los Andes. Posteriormente, fue trasladado al CET de Putaendo, donde continuó el último año de estudio. Para este 2020 su desafío es nuevo: iniciar ingeniería en administración de empresas en el instituto AIEP
“Hace poco acabo de terminar la práctica y ahora estoy en proceso de titulación. A la vez aquí me han brindado el apoyo para poder estudiar la carrera de ingeniería en administración de empresas. Si bien es cierto que nosotros cometimos errores en el sistema libre, errores que nos trajeron a este lugar, he podido comprender los errores que causé en mi vida y pretendo no cometerlos nuevamente para reinsertarme de mejor manera en la sociedad”.
Al igual que Jorge, Luis Muñoz accederá la educación superior, cursando la carrera técnica de administración en logística en la UPLA. A sus 50 años confiesa que “me casé muy joven y llegaron los hijos. Siempre quise estudiar, pero como entré al campo laboral quedaron postergados los estudios. Nunca es tarde para prender, espero tener mi título profesional y eso me da muchas más herramientas para enfrentar la vida cotidiana”.
A escasos días de salir a estudiar tanto los usuarios como los funcionarios de Gendarmería se preparan para este desafío que busca generar cambios y aportar significativamente a la reinserción social de quienes hoy están pagando por errores cometidos en el pasado.